Nunca guardar lentes rotos en casa. Sin embargo y en caso de ser necesario hacerlo, los debemos guardar junto a una estampa de Santa Lucía, para evitar problemas de tipo médico con nuestros ojos y los de familiares y amigos.
Mortero que, dicho sea de paso, es bien recordado por todos, dado que era la herramienta con la que las abuelas elaboraban sus preparaciones para sanar muchas dolencias.
En ninguna casa debería faltar una buena cabeza de ajo. Además de las propiedades medicinales, a las que, por lo pronto, no aludiremos para no desviar la temática, el ajo es protector y un estupendo aislante.
De otro lado pero en el mismo sentido, digamos que es muy conveniente tener muchas
llaves (juntas) en la despensa o en un cajón de la cocina. Aclaremos, eso sí, que mientras más antiguas sean las llaves, más poderosa será la atracción de la buena suerte.
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