Esta vela es protectora de la autoridad, la virilidad y la juventud así como también de los accidentes y caídas. Por otro lado, impulsa todo tipo de proyectso que se deseen iniciar. En lo relativo a la salud, previene de intoxicaciones, ayuda a la recuperación de las personas que han sufrido una operación recientemente, protege los riñones y las glándulas suprarrenales.
Es la vela de los signos Aries y Escorpio. Aries representa el principio y el final, mientras Escorpión es el continuo renacer a una vida mejor. Ambos signos están regidos por el mismo planeta, Marte, que también es el planeta correspondiente a la vela roja.
El mejor día para realizar el ritual con la vela roja es el martes. Realizarlo en este día nos dará los mejores resultados posibles. La hora más idónea será la tercera desde la salida del sol, es decir, hacia las 11 horas en nuestro horario.
Previamente al ritual debemos escribir en un papel blanco con tinta roja el nombre del arcángel de la vela roja, Samael. En otro papel escribiremos el número tres, símbolo de esta vela.
A continuación diremos en voz alta la siguiente oración:
Me dirijo a tí, Padre Celestial, en el nombre de tu hijo el arcángel Samael, y te suplico de tu gran amor hacia nosotros tus hijos amados, que se haga posible… (aquí explicaremos cuál es nuestro deseo o petición)
Gracias, bendito sea tu nombre, por los siglos de los siglos. Amén
Si lo deseamos podemos incluir en nuestro ritual algún elemento de entre aquellos que guardan especial relación con la vela roja. Hacerlo dotará de mayor poder al ritual y tendremos mayores posibilidades de conseguir aquello que hemos pedido. Estos elementos son el hierro, el granate, el cactus o el clavel rojo – bien en flores o en perfume.
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